Review: Where the wild things are (2009) Spike Jonze

No me había atrevido a escribir nada en mucho tiempo, las excusas son las de siempre... mucha pega, poco tiempo para ver películas y la mas odiosa de todas no me pasa nada con las películas nuevas.

Si pudiera enumerar la cola que tengo de películas que me faltan por ver seguramente la persona que me leyera diría "que patudo es este tipo que escribe de cine sin siquiera ver lo que se piensa que ve", de todas formas prometo acabar con esa lista apenas logre dominar mi daydreaming.

Where the wild things are estuvo en cola por mas de 6 meses, la empecé a ver como en 3 ocasiones pero el sueño o el multitasking me venció. Hoy crucé el puente y debo decir que he quedado babosamente maravillado. Concepto totalmente nuevo y absurdo pero es la verdad, WTWTA me impresionó cada minuto, cada frame parecía estar hecho a mano con una estética inocentona pero tan bien cuidada muy a la indie-naif que nos hemos acostumbrado estos últimos años de la mano de directores como Michel Gondry, Jason Reitman y obviamente el dueño de estos monstruitos Spike Jonze.

Where the wild things are es una oda a la niñez, a la imaginación mas pura que una persona pueda tener, una busqueda infinita por encontrar la magia de las cosas puras en donde la maldad y la agresividad no tienen cabida. Spike Jonze nos narra una historia extremadamente simple en donde un niño (Max) de una creatividad desbordante huye de su hogar al tener un altercado menor con su madre, este Max que alucina con ser un lobo arranca raudamente por una calle y en un par de minutos se encuentra navegando en un mar infinito, un mar que lo lleva a un lugar en el que quizás porfin el podría hacer lo que imaginara, un lugar en donde sus habitantes (The Wild Things) lo escucharian, lo adorarían y estarían dispuestos a seguir sus aventuras. Son exactamente estas criaturas las que se roban la cinta. Son unos grandes monstruos peludos con cara de peluches, una suerte de ewoks tamaño familiar que exudan nobleza, suavidad y ternura por donde se les mire. Estas criaturas en conjunto con Max, el apartado visual y la encantandora musica de Karen O (Yeah Yeah Yeahs) configuran una de las fabulas cinematográficas mas maravillosas que he tenido la posibilidad de ver, a ratos es dificil no sentirse conmovido por lo que se nos muestra en pantalla y es ahí una de las principales gracias de Where the wild things are, el mostrar esa magia de ver las cosas como cuando eramos niños, cuando disfrutabamos de tener dias libres, de dibujar lo que se nos ocurriera, de soñar mundos fantásticos, de crear lugares en donde siempre eramos reyes y sobretodo, levantarnos todos los dias y creer en la felicidad con las cosas chicas.